Un mensaje de Charles Chaplin

6a00cdf7e3c1f3094f00d09e4d3353be2b-320pi.jpgHace un tiempo escuché por primer vez una rola de Timo Tolki(Guitarrista y líder de Stratovarius) la rola me gustó,y me llamó mucho la atención un discurso que dice un tipo al final de la canción,como suelo hacer, rápidamente empezé a buscar qué rollo con ese discurso y encontré que era un discurso de una película de Charles Chaplin que se llama «The Grat Dictator (El Gran Dictador) y me fuí a Emule por supuesto, bajé la película (de 1940aprox) en blanco y negro, me gustó, y si, efectivamente el discurso era de la película esa,ya me salí mucho de tema, el caso es que el diuscurso esta bien chilo, es muy tarde y me dió flojera traducirla, pero encontré una traducción en una página española, sólo cambié palabras como «os entregueius» «Vuestros» etc etc, bueno pues, les dejo el discurso, de Charles Chaplin en la película»El Gran Dictador» (Algo botana la película por cierto»

Aquí ta:

«Lo siento, pero no quiero ser emperador. No es lo mío. No quiero gobernar o conquistar a nadie. Me gustaría ayudar a todo el mundo -si fuera posible-: a judíos, gentiles, negros, blancos. Todos nosotros queremos ayudarnos mutuamente. Los seres humanos son así. Queremos vivir para la felicidad y no para la miseria ajena. No queremos odiarnos y despreciarnos mutuamente. En este mundo hay sitio para todos. Y la buena tierra es rica y puede proveer a todos. El camino de la vida puede ser libre y bello; pero hemos perdido el camino. La avaricia ha envenenado las almas de los hombres, ha levantado en el mundo barricadas de odio, nos ha llevado al paso de la oca a la miseria y a la matanza. Hemos aumentado la velocidad. Pero nos hemos encerrado nosotros mismos dentro de ella. La maquinaria, que proporciona abundancia, nos ha dejado en la indigencia. Nuestra ciencia nos ha hecho cínicos; nuestra inteligencia, duros y faltos de sentimientos. Pensamos demasiado y sentimos demasiado poco. Más que maquinaria, necesitamos humanidad. Más que inteligencia, necesitamos amabilidad y cortesía. Seguir leyendo